Wednesday, October 04, 2006

HOUSE OF LORDS / TIGERTAILZ

29 de septiembre de 2006. Sala Copérnico

Volvían a visitarnos en España dos de las bandas que participaron en la edición de este año del Lorca Rock. Una participación que no fue excesivamente lucida en el festival murciano, sobre todo por parte de House Of Lords, y parece que las críticas recibidas al respecto retrajeron a más de uno a la hora de acercarse a la sala de Argüelles donde desarrollaron su actuación. Alrededor de doscientas personas calculo que estaríamos presentes para ver un concierto con el que muchos hubiéramos soñado hace años, pero que por lo visto actualmente queda para unos pocos nostálgicos. Y por lo que pudimos ver, que queréis que os diga, bendita nostalgia, porque el que no fue se lo perdió.

Pero vamos desde el principio. TIGERTAILZ, un grupo tan limitado técnicamente, como entregado y divertido en sus conciertos. Sin casi calidad en sus músicos, con el sonido ciertamente saturado en algunos momentos, y con apenas un disco completo que pase un mínimo nivel de calidad compositiva, estos cuatro galeses fueron capaces de ofrecernos una hora de intenso y divertido hard rock glamoroso que sirvió como buen aperitivo para calentar al personal para el plato fuerte de la noche. Una docena de temas, la mitad de ellos de su álbum más reconocido “Bezerk”, un par de ellos de “Banzai” otro par de su nuevo “Bezerk 2.0” que se supone deberían presentar, y sólo uno de su debut “Yong And Crazy”, fueron suficientes para volver a demostrar todos los extremos que dejaron patentes en el Lorca. Prácticamente el mismo repertorio, actitud igualmente provocadora y entregada, y el único cambio de la entrada del cachas Glen Quinn, sustituyendo al bajo al carismático Pepsi Tate que se perdía una gira del grupo por primera vez en veinte años debido a una afección estomacal. Quinn cumplió su papel y apoyó en los coros al guitarrista Jay Pepper y al vocalista y guitarra rítmica Kim Hooker que se mostraron bastante correctos técnicamente y muy cercanos con la audiencia, posando continuamente.

Abrieron con “Sick Sex”, marcando la tendencia de los siguientes cortes, “Livin’ Without You”, “Love Overload” y “I Can Fight Dirty Too” que hicieron que, sobre todo las primeras filas se movieran a base de bien. Siguieron por el buen camino con “Shoot To Kill” que sonó más contundente y oscura, para posteriormente presentar “Falling Down” de su último trabajo que bajó un poco el nivel de excitación, que se recuperó con “Noize Level Critical” otra de las más aclamadas. La recta final se me hizo un poco más pesada, con temas menos claros, como “Murderess” o “Dirty Needlez”, hasta “Love Bomb Baby” que siempre es una fiesta para cerrar me resultó algo sosa, aunque parezca increíble, me gustó mucho más en Lorca. Se despidieron, cumplieron y creo que tampoco se les puede pedir mucho más.

Y tras una breve espera por fin podíamos ver en Madrid a una de las bandas más elegantes surgidas en el hard rock americano de los 80’s. Con los primeros grabados compases de la intro de “Sahara” empezó casi hora y media de puro deleite musical. He leído en algunos foros quejas de gente que encontraba demasiados elementos pregrabados en la actuación de HOUSE OF LORDS, y sí ciertamente los hubo, sobre todo los teclados ya que Gregg Giufrria sigue en sus tareas empresariales y hace años que no sale de gira, y en algunos coros. Pero que queréis que os diga, prefiero mil veces escuchar los teclados grabados a no escucharlos, por lo menos en grupos como este en los que son fundamentales. Los eché mucho de menos en Lorca y en está ocasión sonaron perfectamente empastados con la música en directo de la banda que sonó brutal. Alguno me dijo que le sonaron muy duros, yo creo que lo que sonaron fue muy potentes y muy nítidos.

Con un Jimi Bell en la guitarra que consigue impresionarme nota tras nota, con Chris Macvill que es un espectáculo con su bajo y con sus enormes coros, con un BJ Zampa lleno de sobriedad y contundencia sobresaliente en la batería, y sobre todo, con un James Christian que sencillamente lo bordó, ¡Qué maravilla de voz!, potente y melódica como pocas y transmitiendo con un feeling enorme. En cuanto al repertorio fue ciertamente acertado, recordando en gran medida su obra maestra homónima con cortes tan maravillosos como “I Wanna Be Loved”, “Slip Of The Tongue” que sonó cañerísima, la enorme balada “Love Don’t Lie” que me puso los pelos de punta tanto por la voz de Christian como por el enorme solo de Bell o la grandiosa “Pleasure Palace” que resultó magistral. De sus otros trabajos anteriores rescataron la mencionada “Sahara” perfecta para abrir fuego, el medio tiempo “Can’t Find My Way Home” del mismo trabajo que también sonó fantástica con James Christian tirando de guitarra acústica, o la más cañera “Talkin’ Bout Love” de su más olvidado “Demons Down”.
Por supuesto lo que no olvidaron fue su último gran trabajo “World Upside Down” del que interpretaron en mi opinión sus mejores temas, las más rockeras y guitarreras “I’m Free” y “Rock Botton” que si ya son buenas en disco en directo ganan una barbaridad, con una garra y un rollo increíbles; no se quedaron atrás las más melódicas “These Are The Times” hit single perfecto, “All The Way To Heaven” llena de feeling, y sobre todo mi corte favorito de su último disco, “S.O.S. In America” que maravilla de tema y como me gustó que lo incluyeran en el repertorio. Alguno dirá que estoy exagerando, que si con tanto grabado ya podrán, que si Christian está gordo, pero la verdad es que a mi lo realmente importante que es la calidad de los músicos y lo que fueron capaces de transmitirme hizo que disfrutara enormemente y que me pareciera un conciertazo. Ojalá sigan por el mismo camino, tanto en disco como en directo.
Mariano Palomo

0 Comments:

Post a Comment

<< Home